BloqueoAVde2ºgrado

martes, 2 de octubre de 2007


El bloqueo cardíaco de segundo grado adopta dos tipos: I (Wenckebach) y II de Mobitz. En el tipo I hay un alargamiento progresivo del tiempo de conducción hasta que se deja de conducir un impulso. El bloqueo cardíaco del tipo II supone bloqueo súbito ocasional o repetitivo de la conducción de un impulso sin un alargamiento medible previo del tiempo de conducción.
La no conducción de la onda P puede ser intermitente o frecuente, a intervalos regulares o irregulares, y precederse de intervalos PR fijos o crecientes. Las ondas P se relacionan con el complejo QRS con intervalos PR recurrentes (la asociación de la onda P con el complejo QRS no es aleatoria, característica definitiva). Electrocardiográficamente, en el bloqueo AV del tipo I típico hay prolongación progresiva del intervalo PR que culmina con una onda P no conducida, mientras que en el tipo II el intervalo PR permanece constante antes de la onda P bloqueada. En ambos casos el bloqueo AV es intermitente y generalmente repetitivo, y puede bloquear varias ondas P en una tira. Con frecuencia se aplica el epónimo tipo I de Mobitz y tipo II de Mobitz a los dos tipos de bloqueo, mientras que el término bloqueo de Wenckebach se refiere sólo al bloqueo de tipo I. Un bloqueo de Wenckebach en el sistema de His-Purkinje en un bloqueo de rama puede ser muy similar a un bloqueo de Wenckebach del nódulo AV.
Los bloqueos AV de tipo I y II son manifestaciones del mismo mecanismo electrofisiológico y difieren sólo en el tamaño de los incrementos, aunque la separación de los bloqueos AV de segundo grado en bloqueos de tipo I y de tipo II es útil, y generalmente esta diferenciación es sencilla y fiable con el ECG. El bloqueo AV de tipo II con frecuencia precede a un síncope de Adams-Stokes, mientras que el bloqueo AV de tipo I con complejo QRS normal generalmente es más benigno y no progresa a formas más avanzadas de trastorno de la conducción AV. En ancianos el bloqueo AV de tipo I con o sin bloqueo de rama se ha asociado a un cuadro clínico similar al del bloqueo AV de tipo II.
En el infarto agudo de miocardio, el bloqueo AV de tipo I suele acompañar al infarto inferior (con más frecuencia si también hay infarto del ventrículo derecho), es transitorio y no precisa estimulación temporal, mientras que el bloqueo AV de tipo II aparece en el contexto de un infarto agudo de miocardio anterior, puede precisar estimulación temporal o permanente y se asocia a una elevada tasa de mortalidad, generalmente por fallo de bomba. Se puede producir un alto grado de bloqueo AV en el infarto agudo de miocardio inferior y se asocia a una lesión miocárdica más extensa y a una mayor mortalidad que los que no tienen bloqueo AV.
El trastorno de la conducción de tipo I es ubicuo (aparece en cualquier tejido cardíaco in vivo, además de in vitro), pero su localización se determina a partir del ECG, sin necesidad de estudios electrofisiológicos invasores, en la mayoría de los casos. El bloqueo AV de tipo I con complejo QRS normal casi siempre se produce a nivel del nódulo AV, proximal al haz de His. Una excepción es el infrecuente bloqueo de tipo I intrahisiano. El bloqueo AV de tipo II, particularmente cuando se asocia a bloqueo de rama, se localiza en el sistema de His-Purkinje. El bloqueo AV de tipo I en el bloqueo de rama se puede deber a bloqueo en el nódulo AV o en el sistema de His-Purkinje. El bloqueo AV de tipo II ante un QRS normal orienta a un bloqueo AV intrahisiano, aunque es probable que sea un bloqueo nodal AV de tipo I, con pequeños aumentos del tiempo de conducción AV.

Datos personales